¿Qué es el TLD y por qué es tan importante para tu sitio web?

De seguro cuando navegas por internet te has dado cuenta de que la parte final de los dominios suele cambiar. La mayoría culmina con un “.com”, pero también los hay “.net”, “.es”, “.pt”, entre muchos otros más.

Si te has percatado de esto, es probable que más de una vez te hayas preguntado por qué es algo que cambia.

A esa última sección de los dominios se le conoce como TLD (Top-Level Domain) y a pesar de estar al final, es de gran relevancia para tu sitio web.

Ahora bien, ante tantas variantes cabe preguntarse: ¿Cómo saber cuál es mejor TLD para mi web? ¿Es algo que yo mismo puedo elegir? ¿Qué tipo de cambios genera el mismo?

Todas y cada una de estas dudas son válidas y nosotros nos encargaremos de darles respuesta.

¿Qué es el TLD?

En su traducción al español las siglas del TLD pueden ser entendidas como “Dominio de Nivel Superior”, aunque también suele ser reconocida como “extensión de dominio”.

De forma simple, el TLD es aquella parte que se encuentra hacia la derecha de cualquier dominio, justo después del punto.

Los mismos se encuentran registrados en la ICANN (Internet Corporation for Assigned Names and Numbers). Esta es una organización sin fines de lucro que se encarga de otorgar los dominios a los webmasters.

Al momento de crear tu sitio web, deberás pensar en cuál es el dominio que quieres que tenga y, por supuesto, elegir el TLD.

Si bien en un primer momento podrías pensar que lo mejor es elegir el más común (.com), lo cierto es que deberás tener en consideración el propósito de tu web.

Ya que, según tu TLD, muchos aspectos pueden variar, en especial sobre el impacto que tenga tu sitio web dentro de la red.

Entonces… ¿Para qué sirve el TLD?

Todo tu dominio web es fundamental para poder brindarle a tus visitantes un fácil acceso a tu plataforma, pero sobre todo para hacer que la memorización de las direcciones webs sea mucho más sencilla.

Por supuesto, el nombre del dominio en sí es el que juega un papel más importante, ya que suele estar compuesto por el nombre de la marca o la empresa en cuestión.

Pero el TLD también tiene su parte protagónica ya que permite una mejor representación de ciertos datos sobre tu sitio web.

En la mayoría de los casos el Dominio de Nivel Superior permite identificar la ubicación geográfica de la web, su finalidad, su propietario, entre otros aspectos de identificación que son importantes.

Ahora bien, esto es algo que varía según el tipo de TLD que quieras utilizar y esto te lo explicaremos en la siguiente sección.

Tipos de TLD

Es fundamental destacar que los TLD se encuentran categorizados en diversos grupos, para poder tener un mejor entendimiento de cuál es el objetivo de cada uno.

Así que, antes de elegir cuál es el TLD que quieres utilizar para tu sitio, necesitas tener en cuenta las diferencias entre los distintos tipos de TLD.

En la actualidad, hay tres que pueden ser reconocidos como los más importantes de todos y esos son:

gTLD (Dominios genéricos de nivel superior)

Tal y como su nombre lo indica, los gTLD son los más comunes de todos y los que han estado disponibles desde un principio.

Son los más reconocibles de todos ya que forman parte de los que más se han utilizado en los sitios web de todo el mundo. Entre algunos de ellos se encuentran:

• .com – En la actualidad es el más utilizado, pero solía emplearse sólo para webs comerciales.

• .net – Es empleado sobre todo por empresas y compañías.

• .org – Se asocia con las organizaciones sin fines de lucro o que trabajan de forma benéfica.

• .tech – Empleado por los sitios webs de las empresas tecnológicas.

• .xyz – Su uso es frecuente entre los sitios web de comercio electrónico.

• .app – Utilizado para sitios webs de aplicaciones.

sTLD (Dominios de nivel superior patrocinados)

Ahora bien, en lo que respecta al sTLD, se trata de un tipo de dominio dedicado para las webs que tienen un propietario en específico.

Por ejemplo, es el tipo de TDL que los entes gubernamentales y las organizaciones privadas suelen utilizar para diferenciar su presencia en la red de los sitios web convencionales.

En este caso en específico, los ejemplos más comunes son:

• .gov – Empleado por las agencias gubernamentales, sobre todo de Estados Unidos.

• .int – Es usado por las organizaciones internacionales que tienen tratados especiales.

• .edu – El TDL predilecto para los sitios webs de instituciones educativas.

• .cat – Empleado sobre todo por las comunidades lingüísticas o por sitios web de cultura catalana.

• .tel – Utilizado por los sitios web que ofrecen servicios de comunicación por medio de internet.

• .mil – Frecuentado por las agencias militares, sobre todo de Estados Unidos.

ccTLD (Dominios de nivel superior de código de país)

Para finalizar, se encuentra el ccTLD, el cual es empleado para representar la zona geográfica del sitio web en cuestión.

Como te podrás imaginar, es en esta categoría en donde se encuentran una mayor variedad de TLD en general. Ya que, existen TLD para países, estados, uniones de naciones, etc.

Para que te hagas una mejor idea de cómo se encuentran representados a nivel de dominio, algunos ejemplos pueden ser:

• .us – Estados Unidos.

• .es – España.

• .pt – Portugal.

• .eu – Unión Europea.

• .ca – Canadá.

• .mx – México

• .it – Italia.

¿Cómo elegir un TLD?

Ahora bien, ya que conoces más sobre el TLD y las grandes variaciones que existen, tienes en claro de qué se trata.

Pero si estás en ese momento en el que debes elegir cuál será la extensión de tu dominio, de seguro tendrás dudas sobre cuál elegir.

Llegado a ese punto hay diversos factores que deberás tener en consideración si quieres tomar una decisión que se ajuste al objetivo de tu web.

Así que, para elegir un buen TLD, te recomendamos seguir estos consejos:

1. Identifica el objetivo de tu sitio web

Lo primero que debes tomar en cuenta es el objetivo de tu sitio web. ¿Será una web empresarial? ¿Será una web de ventas en línea? ¿Será una web para una ONG?

Como te mencionamos con anterioridad, existe un TLD ideal para cada tipo de sitio web y te vendría bien apegarte a esa clasificación.

Por ejemplo, si vas a crear una web de contenido académico, lo mejor será que utilices el “.edu”.

2. Evalúa la popularidad de los TLD más reconocidos

Según el país en el que te encuentres y el tipo de público objetivo que quieres alcanzar, deberás evaluar la popularidad de los TLD más importantes.

Existen algunos dominios de extensión que son más fáciles de reconocer dentro de una región que de otra y por ello es fundamental tenerlo en cuenta.

Siempre te será de ayuda emplear aquellos que son más populares para así brindarle un mayor nivel de confianza a tus visitantes.

3. Piensa en tu ubicación geográfica

Debes tomar en cuenta el objetivo de tu negocio para decidir si especificar tu ubicación geográfica es algo que resultará relevante.

Si tienes una tienda en línea para vender productos de forma virtual, entonces la respuesta es sí. Ya que, mediante el TLD tus clientes podrán saber si pueden acceder a tus productos.

Es decir, si alguien que vive en España busca una tienda de ropa en línea, pero ve que su extensión es “.mx”, sabrá que es de México y que debe buscar en otro sitio web (a no ser que realicen envíos internacionales, por supuesto).

Pero en este caso en específico, siempre será mejor que utilices un TLD geográfico para dejarles las cosas claras a todos tus clientes potenciales.   

4. Procura que sea un TLD fácil de recordar

Por último, pero no menos importante, debes procurar emplear un TLD que sea sencillo de recordar.

Si se piensa de esta manera está más que claro que el típico “.com” es el más sencillo de memorizar de todos.

Aunque aquí también entra en juego la facilidad del nombre de tu dominio y lo combinado que quede con el TLD. Si bien no es el punto más importante de todos, siempre viene bien tomarlo en cuenta antes de realizar una elección definitiva.

¿Cuál es la importancia del TLD?

Sin duda alguna, existen muchos factores por los cuales el empleo correcto de un TLD debe ser bien valorado y si aún no has determinado esto tú mismo, necesitas estar al tanto de cuál es la importancia del TLD.

Lo cierto es que hay diversos puntos a destacar sobre esto. Pero sin lugar a duda los aspectos que le dan una mayor relevancia al TLD son:

1. Le brinda identidad a tu marca

Primero que nada, el TLD resulta importante porque le brinda un mayor nivel de identidad a tu marca.

En vista de que cada tipo de extensión de dominio significa algo en específico, los usuarios podrán reconocer de forma más rápida de qué va tu sitio web.

Supongamos que el nombre de tu marca es bastante particular y no da indicios de qué puedes vender o qué tipo de contenido puedes crear.

Es entonces cuando a las personas les vendría bien conocer de qué va tu sitio con tan solo ver tu TLD. Así podrán determinar si es el tipo de plataforma que pretenden visitar o no.

2. Permite una mejor geolocalización

Tal y como ya se ha mencionado con anterioridad, la geolocalización es un factor de gran relevancia en lo que al TLD respecta.

Por supuesto, dependerá de ti y del objetivo de tu web si esto es algo que necesitas resaltar.

Sin embargo, su importancia está más que clara, ya que le podrás hacer saber al público desde un principio hacia quién está dirigido tu contenido, productos o servicios.

3. Te ayudará a incrementar tus visitas

Los TDL no suelen tener un impacto en el SEO como tal, pero sí que pueden generar cambios positivos en lo que a las visitas manuales respecta.

Es decir, siempre que tengas un TDL reconocido, los internautas se sentirán más seguros de entrar a tu sitio web.

De igual manera, si es simple de recordar, las posibilidades de que vuelvan a tu web por su propia cuenta aumentan de forma notable.

4. Le brinda una mayor protección a tu marca

Por si todo esto fuera poco, debes saber que un buen TLD te será de ayuda para proteger tu marca dentro de la red.

Ya que, te permitirá ser mejor reconocido y evitar que otras personas intenten crear una copia fraudulenta de tu web.

¿La elección de tu TLD afectará al SEO?

Ahora bien, como ya se mencionó de forma breve, el TDL no va a interferir con el SEO de tu sitio web como tal.

Esto es gracias a que los motores de búsqueda se encargan de clasificar a los sitios web por la calidad de su contenido y no por la extensión del dominio.

Por lo tanto, en lo que a navegadores web respecta, no obtendrás ni pros ni contras debido a tu TLD.

Eso sí, puede que tenga efectos indirectos. Si es difícil de recordar, es probable que cuando alguien quiera volver a visitar tu web lo escriba mal.

Además, si empleas un TLD poco conocido, las personas no se sentirán seguras de entrar, por lo que el porcentaje de visitas a tu web iría en caída.

Por ello resulta fundamental que a la hora de elegir cuál será el TLD de tu dominio, tomes en cuenta los consejos que ya te hemos dado.

Sin duda alguna, ahora más que nunca estás consciente de la importancia que tiene el TLD para cualquier sitio web.

Al tratarse de un factor que le brinda un mayor nivel de identidad a tu sitio, podrás alcanzar mucho mejor a tu público objetivo.

Si estás en el proceso de creación de tu sitio web, ¿Ya elegiste tu TLD? ¿Qué vas a hacer ahora que reconoces la importancia del mismo?

Nos interesa conocer tu opinión sobre el tema, así que no te vayas sin dejarla en la sección de comentarios.